Los servicios de noticias se han pasado discutiendo de los arrestos de funcionarios públicos por el fraude a una aseguradora. Supongo que esto no le debe sorprender a nadie, ya que el gobierno de Puerto Rico es uno que está plagado por inversionistas y oportunistas políticos. Cuya única virtud es la de ser miembro del partido político que ganó el concurso de popularidad que llamamos elecciones.
La desmantelación del sistema de merito a favor de un sistema de despojos permite que la basura entre al sistema, y si basura entra basura sale. ¿Qué se puede esperar de las personas que entran al gobierno no porque ser los mejores en su campo? o ¿Qué no se hayan esforzado por desarrollar las habilidades necesarias para cumplir con un puesto?
Me alegra sobre manera cuando algún empleado de un legislador es atrapado en casos de corrupción. Me deleita que el legislador sea manchado por la acción delictiva de su empleado. Porque los legisladores tienen que entender que el mero hecho de que una persona trabaje en un campaña política no lo prepara para realizar una trabajo profesional.
Las personas que trabajan en campañas políticas de PR son los que no tienen la habilidad de realizar un buen trabajo en el mundo real. Son los que estarían desempleados porque no dan el grado en el mundo profesional. Así que tienen que buscar maneras alternativas para lograr un puesto en el gobierno. Son las rémoras que se unen a un tiburón, porque ellos mismos nunca llegaran a ser tiburones.
Las personas de verdadero talento son empleadas en el sector privado o son tan buenos en sus trabajos que han podido sobrevivir el sistema de despojos actual. La otra alternativa, han dejado el país. La excelencia en el gobierno ya es una anomalía estadística.
Estos arrestos continuarán y mi alma se engrandece de la alegría y la esperanza que continúen los arrestos por corrupción en el gobierno. Porque cada vez que surge este tipo de arresto se arroja luz al hecho de cuan involucionado esta nuestro sistema de gobierno…