miércoles, 12 de diciembre de 2012

Capítulo del Vox Exigua: Tomo 2

 
He escuchado tantas tonterías relacionadas al 12 de diciembre del 2012 (12-12-12, 12.12.12, 12-12-12, etc.) que he decidido publicar uno de los ensayos que publiqué en mi más reciente libro, Vox Exigua: Tomo 2.

Disfrútenlo o revuélquense en mi herejía (hacia los esoteristas)… :p

A.

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El Gran Secreto de los Números


En el momento que abandonas el método científico, dejas de ser un matemático y te conviertes en un numerólogo.

Pi, (1998)


Los números son un gran misterio para la mayoría de las personas. El mero uso pragmático del diario vivir se ha convertido en casi un conjuro incognoscible para la mayoría de los seres humanos. Cuantas veces vemos en las tiendas a las personas intentado lograr descifrar el gran misterio de cuanto es el por ciento de descuento de lo que quieren comprar. Cuantas emociones invocan y evocan en las personas ciertos números. Como los sagrados números de la lotería o el precio de la gasolina o el pan.

Por eso no ha de sorprender que la mayoría del populacho le dé poderes y significados mágicos a los números.

El uso de los números es una constante en las órdenes místico esotéricas y fraternales, siendo la numerología un elemento clave del misticismo. En muchas de estas órdenes se utiliza los números como forma de adiestramiento o para transmitir algún conocimiento oculto (o por lo menos esto es lo que reclaman).

Dentro de las diferentes órdenes existen disciplinas cabalísticas como la gematria,temura y notaquiron. También se puede mencionar la geometría divina, versiones de la arquitectura sagrada, los pitagóricos, ciertos tipos de astrología, y otras tantas fantasías.

Pero, en los números mismos no hay grandes secretos. Los números son una simple manera de comunicar algún significado. El cual ha sido construido por las personas para transmitirlo.

En la modernidad donde tenemos lenguajes vivos y complejos se nos hace difícil concebir que en algún momento idiomas disponibles a las personas fueran limitados.

Donde a las letras se le asignaban múltiples significados. Así, por ejemplo, Alefes la letra A, a la vez que el número 1. No es que haya algún significado místico, esto lo único que hace es reflejar la realidad del desarrollo lingüístico de un grupo étnico social.

Por qué todos esos neumólogos de la actualidad no intentan hacer operaciones de gematria, temura y notaquiron con el hebreo actual. O con cualquier otra lengua moderna. Excusas de más tendrán para no hacer lo que no pueden hacer.

Cuan risible es la astrología. La cual le da significado cuasi matemático a las supersticiones del pasado. Las cuales estaban muy ligadas a la información disponible de los cuerpos celestes de aquella época. Si son doce constelaciones, que pasa cuando se descubran nuevas u otras sean golpeadas por asteroides y sean destruidos o se conviertan súper novas.

Pero no hay mayor tontería moderna con los números que la obsesión con las horas y fechas especiales.

Esta obsesión con las horas y las fechas lo único que refleja es una gran ignorancia de cómo estas se han establecido para el uso de la sociedad en general. Cuya principal finalidad es la de poder fraccionar el constructo social del tiempo para poder hacer posible una actividad económica complicada.

Igual de ignorante del hecho que prácticamente cada grupo social ha establecido su propia forma de contabilizar el constructo social de tiempo. Los judíos, musulmanes (y prácticamente todo grupo religioso o político) tienen su forma de marcar el tiempo. Prácticamente toda religión tiene su forma de marcar el tiempo a base de algún momento significativo, e.i. el nacimiento de su profeta, la redacción de su libro sagrado, etc. De igual forma toda orden místico esotérica y fraternal tiene su forma de marcar el tiempo.

Cuantos recuerdan la histeria por el año 1999. Que no se nos olvide que la historia ha estado plagada con la fiebre centenaria y milenaria, donde las personas pierden la razón por la superstición que algo importante pasará cuando cambia el calendario.

Qué habrá pasado el 7 de julio de 2007 o el 11 de noviembre de 2011. La realidad es que nada importante ha pasado. En ninguna de estas fechas, por ser fecha ‘especial’ sucede algo. No hubo grandes cataclismos o cristo regresó o un nuevo buda nació.

Más aun cuantos 6 de junio de 2006 han existido en diferentes culturas; o tendrá significado esotérico que los emperadores romanos renombraron y crearon nuevos meses sólo para perpetuar su ego. ¿Cómo habrá trastocado eso todos los significados místicos de los esoteristas?

Podríamos argumentar que el 4 o 14 de julio o el 11 de marzo o septiembre son más importantes que cualquier otra fecha que los esoteristas le den algún significado místico.

Las horas son algo interesante en el aspecto de la superstición. Por un lado tenemos algunas que se basan en los ciclos de sueño. Como los gnósticos de samael que creen que la alquimia sexual debe realizarse a las 3 am.

El pragmatismo de los Laveyanos afirma que el mejor momento de hacer trabajos mágicos es por la noche, ya que las potenciales víctimas normalmente están durmiendo. Y están los que siguen la magia ritual que le han dado horas específicas para comenzar el trabajo mágico dependiendo de la operación.

Como en el caso de las fechas, esto lo único que refleja es la ignorancia de la mecánica de las horas. Ya que siempre en algún momento del globo terráqueo, y del resto del universo, será las 11 de la noche. Así, es tonto pensar que las 11:11 es algo especial… es una simple ilusión. Es que los que reclaman que las 11:11 es algo especial dicen que será algo especial en todos los momentos y en todos los lugares donde ocurra esta hora.

Generalmente no, porque las 11:11 será especial cuando la persona está presente. Lo cual implicaría que sólo la interpretación de que las 11:11 es especial lo que la hace significativo.

Llegará el momento que los esoteristas se den cuenta de las tonterías que afirman. Claro que no. La realidad es que los números tienen el significado que nosotros les hemos asignados.

Lo que los supersticiosos no quieren entender es que en los números no hay grandes secretos. Que en algún momento de la historia estos eran simples maneras de comunicar significado en un contexto socio-histórico. El cual se ha perdido o simplemente ya no es relevante a nuestra realidad actual.

Si hay algo que descubrir, es la realidad de lo que fue en algún momento el pensamiento de una civilización que muy probable ya no existe.

Coda

Si en los números hay grandes secretos, quienes tenían estos secretos fracasaron en transmitirlos de manera efectiva. Ya sea por las diferencias que se desarrollan en el lenguaje o cultura a través del tiempo; o la simple mala fe de esconder la información; si el mensaje no se ha transmitido y recibido de manera eficiente se ha fracasado en la enseñanza. Convirtiendo la enseñanza en irrelevante.

Por otro lado, la noción de que la interpretación del mensaje es más importe que la intensión de quien da el mensaje es toda una ridiculez post modernista. Que refleja la pereza de la presente época. Donde ni siquiera se quiere pasar el trabajo de aprender un código, dentro de un contexto histórico cultural, para descifrar que es lo que el emisor del mensaje quiere transmitir.
El emisor del mensaje tiene una información que desea transmitir. Este selecciona cual es el código (lenguaje y tono) y el método (escrito, oral, etc.) que utilizará. Idealmente para transmitirlo de la manera más clara y precisa posible. Quien recibe el mensaje tiene que interpretar el mensaje que ha recibido procurando utilizar el mismo código, entendiendo el método y contextualizando cultural y temporalmente la información. Este le brinda retroalimentación al emisor del mensaje que ha recibido para verificar que la interpretación del mismo es la correcta.

Cuando no se puede ofrecer retroalimentación al emisor, el receptor tiene la responsabilidad de volver a revisar la correcta interpretación de la información dentro del contexto en que esta fue desarrollada.



viernes, 2 de noviembre de 2012

Redefiniendo la Relación Estudiante/Profesor: Presentaciones por Estudiantes



Una de las tendencias resientes en la educación es el obligar a los estudiantes a realizar presentaciones orales de algún tema de la clase. Tema que se elige, o se asigna, del prontuario de la misma. Generalmente esto se convierte en parte de la forma en que será evaluados. Donde el profesor y los estudiantes dirán cual ha de ser la calificación que se obtendrá. Por un lado esto crea un problema, ¿qué estudiante le daría una mala calificación a otro estudiante?

Pero, un problema más serio, es que los estudiantes están siendo timados por el profesor.

Un estudiante que toma una clase de teorías de la personalidad, matemáticas, literatura, etc., lo hace porque quiere aprender (o es un requisito curricular) sobre el tema de la clase. No se inscribe en una clase de teorías de personalidad, matemáticas, literatura, etc., para mejorar sus habilidades de su retórica. Para eso existen grupos como los Toast Masters (verdaderos expertos en el arte de expresarse en público).

En una clase, no se debe aceptar que otros estudiantes nos eduquen a través “de presentaciones grupales o individuales”. Ningún estudiante paga por dar clases, o paga por tomar una charla de otro estudiante. Más importante, un estudiante (salvo raras ocasiones) no posee las cualificaciones necesarias para poder impartir una instrucción sobre algún tema. Por eso es que están en la universidad, para obtener el conocimiento que carece.

Es una falta de respeto por parte de un profesor poner a estudiantes a dar clase, cuando es él quien ha sido pagado para hacer esa labor. Así que un profesor cuya clase se fundamenta en las presentaciones de estudiantes está cayendo en un ejercicio de pereza. Siendo esta pereza un robo a los estudiantes, un profesor que base su clase en presentaciones es un ladrón.

Un estudiante tiene el pleno derecho de exigir que su clase sea impartida por el profesor y no por un estudiante.


jueves, 25 de octubre de 2012

Estadistas y Mendigos




Las campañas publicitarias son fundamentalmente la manipulación demagógica de las masas. Mas cuando se está buscando un fin político que representa el acceso a la administración de millones de dólares. El botín de guerra de corsarios cuya única virtud es  la conseguir inversionistas  que le den dinero para ganar un concurso de popularidad llamado elecciones.

Una de las campañas más detestables (y al final del camino más dañina para el ideal que busca adelantar) es el de los estadistas que quieren vender la imagen que la estadidad es beneficiosa para Puerto Rico. Ya que esta se focaliza en los beneficios para Puerto Rico, en detrimento de los beneficios para otros estados.

El argumento más común para abogar por la estadidad para puerto rico es la obtención en ‘paridad’ en los fondos de los diferentes programas federales.  La realidad es que si Puerto Rico se le otorga la estadidad estados perderían escaños en el congreso. Pero más importante el presupuesto se achica por tener que repartirlo entre más personas. En otras palabras todos tendrán un pedazo de bizcocho más pequeño.

Sobre esto la intención de mendigar se hace patente con las campañas publicitarias que buscan el voto de las personas que no han de producir y contribuir a la Unión. En vez de buscar el voto de personas que producen, buscan el voto de aquellos que mendigan las ayuda federales.

Estos estadistas o asimilistas entienden que la ideología o capacidad no gana elecciones. Miedo y la promesa de beneficio, es lo que asegura la victoria electoral. Estas campañas dicen que ‘si fuéramos estado’ tendríamos más acceso a fondos de educación, medicaid, seguro social, etc.

Esta es la ambición de pobres mendigos o de corruptos que necesitan encontrar nuevas fuentes para robar.

 Al final del camino esto es contra producente. Estas alimañas estadista asumen la ignorancia o a un memoria corta de los estadounidenses. A sus acciones desacertadas le añade el insulto. Porque en algún momento estos anuncios serán traídos a la atención de quienes serán afectados por la admisión de puerto rico a la Unión.

En un Congreso donde la mayoría es conservadora. Donde los republicanos, con sus Tea Baggers (los teteros), y los demócratas conservadores, con sus perros azules, no han de aprobar un proyecto de estadidad a un país de mendigos. Que lo busca no es contribuir a la nación, si no ser una carga para ella.

Una desempleo real que sobre pasa el 20%, con un más de 40% de su población bajo el índice de pobreza, la cual depende de PAN, TANF, WIC, Seguro Social, Medicaid… donde no hay importantes centros industriales, manufacturas o agrícola, JAMAS, ni siquiera se le considerara para ser un estado de los EE.UU.

Una nación de mendigos es lo que los estadistas están construyendo para vender la idea de la estadidad. Voces como las del ex gobernador  Carlos Romero Barceló, ya son una minoría. Ya que este es uno de los que dice que unirse a los EE.UU. es asumir responsabilidades y beneficios en igualdad. Pero está madura actitud no atrae votos.

En vez de estar desperdiciando el dinero en campañas publicitarias que lo único que logra es engañar a la población e insultar a la nación a la que pretende unirse, se debería invertir ese dinero en proyectos que mejoren la realidad social y económica del país.  Para así construir una nación que los  EE.UU. desearían se uniera a su unión.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Para ser Independiente o Estado



Los elementos necesarios para que Puerto Rico logre la estatidad o la independencia son los mismos. Para que se alcanzar cualquiera de estas dos metas (y podríamos hasta argumentar por el ‘ELA Mejorado’) es necesario una estabilidad económica, una dignidad de pueblo y una voluntad colectiva a un mismo fin.

La estabilidad económica que se necesita no es la de tener una imprenta de billetes o que se pida (y obtenga) más ayudas del gobierno federal o algún gobierno extranjero. Para lograr la estabilidad económica es necesario que Puerto Rico comience a producir bienes reales.  Para poder ser económicamente estable se necesita poder suplir las necesidades de su población. Desde el cobijo, alimento, salud, educación y trabajo necesarios para la sobrevivencia hasta los lujos y los ocios que son la recompensa por un trabajo arduo bien ejecutado.

Un país/territorio que no produce jamás se le permitirá convertirse en un estado o podrá sostener una nación políticamente independiente.

Una economía que se fundamenta en el consumo y en las ayudas de un gobierno federal no es un país digno de la estadidad o de la independencia. Aclarando que la ‘independencia’ de otras naciones es un mito. Muy pocos países tienen todos los recursos necesarios para suplir las necesidades de su población. Por lo cual existe una interdependencia económica (a diferentes niveles) entre todas las naciones del mundo.

La dignidad de un pueblo se logra en la medida que este ha desarrollado un ‘orgullo patrio’. Podemos argumentar que no hay persona más orgullosa de su país que los estadounidenses (tal vez lo británicos le puedan hacer la competencia). ‘Proud to be American’, es una frase muy común del estadounidense. Ven la reacción de los estadounidenses al escuchar ‘The Star Spangled Banner’, ‘America the Beautiful’ o ‘The Pledge of Allegiance’. 

Esa misma reacción, ¿Se obtiene de los puertorriqueños? Más allá de los que están en el exilio o cuando se gana en deportes o certámenes de belleza.

Dentro de la ‘Unión’, es muy probable que no haya ciudadanos más orgullosos de ser naturales de su estado que los tejanos. Estos sienten orgullo de ser de la República de Texas, celebran sus fechas importantes, cuidan sus lugares históricos y recuerdan sus personajes famosos. Esto sin sentir vergüenza o ser estigmatizados por ese orgullo local.

Mexicanos celebran sus fiestas donde estén en el mundo, italianos e irlandeses conservan sus tradiciones, gallegos dicen ser primero de Galicia luego de España...

Sin embargo en Puerto Rico no se puede tener un verdadero orgullo de ser puertorriqueño. No el orgullo de ser puertorriqueño porque Barea o Cotto ganó. Es el orgullo de ser puertorriqueño por una larga historia de excelencia. Enorgullecerse de ser del mismo país que Hostos, Betances, Albizu, Barbosa, Muñoz y Ferré…

La dignidad como grupo étnico-racial comienza por conocer la historia de su país y reconocer los símbolos patrios. Nada tiene de malo que el puertorriqueño sienta orgullo de la Mono Estrellada como los tejanos sienten orgullo de su ‘Lone Star’.

Sin embargo, se estigmatiza al puertorriqueño que conoce y celebra su historia. Se le tilda de ser un ‘separatista’. Especialmente por esos morones que abogan por la ‘unión’ (o asimilación) con los EE.UU. Ese morón no entiende que sin orgullo de la tierra de dónde vienes, se está poco preparado para poder ser miembro de la nación donde sus ciudadanos sienten un orgullo casi irracional de ser parte de esa nación.

Finalmente es necesaria una voluntad para lograr la independencia o la estadidad. Se necesita una unidad de propósito y una meta en común. Mientras no exista una voluntad al cambio no habrá ni independencia o estadidad. Quedarse en el ‘statu quo’ no requiere algún verdadero esfuerzo. La inercia de lo cotidiano conspira para los cambios sociales y políticos que sean demasiado radicales.

Grupos estadistas e independentistas, unidos en plena participación decisional con grupos profesionales, de trabajadores, comerciantes y cívicos, deberían trabajar en conjunto para mejorar las condiciones económicas de Puerto Rico para que este puede sostenerse así mismo. Sin tener que depender de fondos federales o ayudas del extranjero. Creando una economía que pueda proveer las necesidades básicas de su población.

Además deben educar a una ciudadanía para que esta conozca y sienta orgullo de la historia, valores y tradiciones de su país. Completando el proceso al presentar la necesaria información, sin sesgos o engaños, para que tomen una decisión hacia donde quieren llevar los destinos del país.

Pero ese requiere una madurez cívica inexistente en Puerto Rico. Requiere de un liderato político serio, inexistente en Puerto Rico. Y que los mejores elementos de la sociedad puertorriqueña actúen responsablemente más allá de la demagogia, ignorancia y oportunismo político, inexistente en puerto rico.

En la actualidad Puerto Rico no está preparado para una independencia, ni tiene los elementos necesarios para que un Congreso de los EE.UU. le otorgue un pedido para la estadidad. Ni siquiera para lograr un ‘ELA Mejorado”.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Lening: Voluntad al Exito




From childhood’s hour I have not been
As other were; I have not seen
As other saw;
Then – in my childhood, in the dawn
Of a most stormy life- was drawn
From every depth of good and ill
The mystery which binds me still:
Edgar Allan Poe, Alone (Excerpt)


Hace 15 años Lening Olivera era un involuntario desertor escolar, con problemas familiares y de acceso a vivienda, nutrición y servicios de salud.

Cuando el Bullying no estaba de moda, Lening lo experimentó, al extremo de la violencia física. Los oficiales de la Escuela Superior Dr. Pila en Ponce, resolvieron la situación al tácitamente expulsarlo. Ya que no podían ‘garantizar su seguridad’.

Después de eso ninguna escuela pública superior de Ponce lo aceptó. Por ser pobre, no se pudo dar el lujo de ir a alguna escuela privada ha terminar su educación. Completó su escuela superior por examen de equivalencia en los Centros Sor Isolina Ferré.

Las cosas llegaron a estar tan mal que por más de un año estuvo sin vivienda. Deambulando de sofá en sofá a la misericordia de familiares y amigos.

En esta época ninguna universidad lo aceptaba por tener Examen de Equivalencia. Lening y su madre tuvieron que luchar para que la PUCPR lo admitiera… bajo probatoria a un programa que eligieron para él, justicia criminal. Eventualmente pudo cambiar al que era la profesión que él quería y se graduó con honores del programa de psicología. Y hasta logró ser admitido en un programa Doctoral en Psicología Clínica. En gloria cerró el capitulo PUCPR.

En su escuela graduada en psicología clínica se distinguió académicamente. Sin embargo los Bullies no sólo están en el patio de una escuela pública. También se encuentra sentados muy cómodos en oficinas con aire acondicionado. Y Lening no tenia la ‘imagen’ que un doctor debía tener. No tenía la religión correcta. No tenía el medio de transportación correcto. No tenía el vestuario correcto. En esa escuela de psicología la imagen es más importante que la sustancia.

En este tiempo Lening descubre la neurociencia y participa en investigaciones neurocientíficas en el Instituto Nacional de la Salud (NIH). Regresando a PR es tomado bajo el ala protectora de un neurocientífico. Quien se convierte en el mentor que lo lleva a realizar investigaciones en su laboratorio y lo ayuda en su disertación doctoral.

Después de muchos traspiés, causados por mezquinos personajuchos, Lening logró graduarse como Doctor en Psicología Clínica.

Por virtud de talento aseguró un Post Doctorado en neurociencia en McGill University en Montreal, Canadá. Desempeñándose como neurocientífico, profesor y mentor.

Luego de 15 años, el Dr. Lening Olivera, Neuropsicólogo Clínico, ha realizado investigaciones neurocientíficas, publicado en diversas revistas y libros, presentado en conferencias nacionales e internacionales, impartido catedra… y su más reciente logro… se desempeña en la Universidad de Yale…

Sus logros son de él, no tiene el dinero de papi o la influencias de un apellido distinguido o conexiones políticas (y menos influencias oligárquicas y plutocráticas en su ‘profesión’). Sus logros son de él porque muy pocos lo ayudaron o lo apoyaron (peor, muchos le tiraron piedras en el camino).

Pero de Lening nadie habla, porque el representa el tesón y la excelencia por virtud de talento y merito propio que llevan a derrotar a las circunstancias de vida… y triunfar…